UN BOBAL DEL NORTE DE LA DENOMINACIÓN DE ORIGEN

UN NOMBRE ROMANO? NO UN VINO

Hoy domingo día 16 de Noviembre, pasado ya el ecuador de un mes bastante sorprendente por sus temperaturas, no han sido sólo éstas y el triunfo de la Selección española de Futbol de anoche sábado contra la selección de Bielorusia los motivos de conversación en la mesa a la hora de la comida y en la sobremesa.

Casi toda la atención la ha acaparado un vino tinto de Bobal que ha venido a nuestras copas traído por José, pareja de nuestra hija pequeña y futuro yerno nuestro.

Habíamos hablado de dicho vino en otras ocasiones pero nunca lo habíamos probado.

Hoy hemos descorchado una botella que nos ha sorprendido mucho.

Es un vino tinto de la Variedad BoBal. Elaborado en una “Bodega Garaje” (esto lo hemos definido nosotros) de La Torre de Utiel. Elaborado de cepas viejas de la uva señalada y procedente de la Coseha 2011.

No está acogido a la DO Utiel-Requena y de dicha elaboración se han hecho 1.000 botellas.

La etiqueta es sencilla y en cada una de ella se recoge en tipografía grande el num. de la botella con relación a las 1.000 elaboradas.

De tal modo y manera que viendo la botella que ha llegado a casa y cuya marca es Pelio, queda tan discreta dicha marca con relación al num. de la botella, que a cierta distancia parece que íbamos a tomar un 108. Claro que otros con la botella 244 por ejem. podrán pensar eso, que iban a tomar un 244.

La razón social queda especificada como Vilarre Vinum.

Es un vino muy cubierto de color. Tiene algún poso de sedimentación que en esta botella estaba en el costado porque llevaba un tiempo en un botellero.

El color de la botella es ámbar (no es muy corriente en España el ámbar, si en Italia que es casi un rito) con cápsula negra.

Tiene un potencial aromático muy importante, limpio, huele a grosellas y, cítricos ha dicho alguien. No parece BoBal ni en sueños.

Tiene una entrada en boca un poco dura, que no persiste, al revés, se difumina rápido y la mejor manera de denominarlo sería con cuerpo y “goloso”, muy atrevido y repetitivo. Te pide beber continuamente.

Para mí una sorpresa, un descubrimiento. Para Vilarre Vinum un motivo de sentirse muy orgullosos.

Volveré a beberlo con mucho placer por mi parte… a buen seguro!!